Trapitos y puntadas

Un espacio para compartir, donde puntadas invisibles dan nueva vida a simples pero generosos trapitos.







martes, 31 de diciembre de 2013

Feliz fin de año - Feliz año nuevo

Faltan pocas horas para terminar el año 2013 y NO voy a hacer balances.
Me voy a alegrar por lo hecho y voy a seguir trabajando para alcanzar nuevas metas, sin que el almanaque me marque límites. Ya muchas "fechas límite" nos propone la vida laboral. En las demás, quiero respetar los tiempos y ritmos que la naturaleza nos impone: la naturaleza "natural" y la naturaleza "de las cosas".
Creo que si aprendiéramos a respetar el orden natural de las cosas, nuestro mundo estaría mejor de lo que está. Este es mi deseo para este año que se inicia.

Buen 2014 para todos. Cariños, Laura


sábado, 21 de diciembre de 2013

Se acerca la Navidad... y nosotros todavía trabajando!

        Es un problema para mí y mi marido que la Navidad coincida con el fin del ciclo lectivo. Es la peor época del año en las escuelas y por eso llego a la Nochebuena con la sensación ir corriendo. Siento que voy a irrumpir en el pesebre y a despertar al Niño, en lugar de acercarme tranquila y sigilosamente para inclinarme y contemplar en silencio el Misterio de Dios hecho hombre.
        Todavía queda un tiempito para ir frenando... Que la Virgen de la dulce espera nos enseñe.


        Mientras reflexionamos sobre esto, les muestro unas botas que hice con una tela que está estampada con un Nacimiento.

Hasta la próxima, dentro de muy poco. Cariños, Laura

miércoles, 6 de noviembre de 2013

Una agarradera y más

El sábado me propuse hacer una agarradera para regalársela a Cecilia y Cristian, unos amigos a los que visitamos ese día. De hecho, terminé de coserla en su casa, mientras tomábamos mate con pan, dulce y tortas caseras. Una imagen que parece tomada de muchas décadas atrás, que a mí me genera mucho placer, y que no sería posible en la casa de otras personas. Es que Cristian y Cecilia tienen la gracia de transmitir paz, procuran relacionarse con la vida desde un lugar más amable, educando a sus tres hermosos hijos en contacto con la naturaleza, lejos de lo que la sociedad acelerada y consumista en que estamos, nos propone. Son de esa buena gente que vale la pena conocer. Por eso me fui con mi agarradera sin terminar y mi costurero, a seguir cosiendo en la casa de ellos, como lo hubiera hecho en la mía.
A Cristian lo conocí hace casi veinticinco años (prácticamente, la mitad de mi vida), estudiando filosofía. Es uno de esos amigos con los que te ves de tanto en tanto, a veces demasiado poco, pero que a la segunda frase que dijiste, sentís que desde el último encuentro no pasó ni una semana. Y te despedís prometiéndote que no vas a dejar que pase tiempo sin reencontrarte con ellos. Espero esta vez cumplir la promesa.

 Volviendo a la agarradera, usé telas y colores navideños, porque no falta tanto para fin de año y aún con las mejores intenciones, dudo que podamos vernos antes.
Así se ve por delante...


...y así por detrás

Pero acá no termina el día. Para reforzar lo que les conté les muestro con qué nos volvimos nosotros de la casa de Ceci y Cristian: pan casero amasado por Cristian, un limón de su limonero, un puerro y una planta de albahaca. ¡Gracias, chicos!



Por ahora me despido hasta la próxima, tratando de "bajar un cambio", a ejemplo de mis amigos.
Cariños, Laura.

miércoles, 16 de octubre de 2013

Funda para cuaderno y sabiduría para la "dire"

He aquí mi funda para cuaderno.
En verdad, es una humorada, porque este es el cuaderno que uso en la escuela y como dicen que la lechuza es el símbolo de la sabiduría,  mejor ponerle un poco, aunque sea por fuera. Ja! Ja! (Les recuerdo o les cuento que soy directora de escuela primaria!)






Acá va el backstage"


Ahora le estoy bordando unas flores y hojitas. Cuando termine se los muestro.
Cariños y hasta la próxima entrada.
Laura



miércoles, 11 de septiembre de 2013

Feliz día del optimista


Hoy en Argentina se celebra el día del maestro. Los que tenemos esta hermosa vocación sabemos de la dificultad de enseñar en estos tiempos de cambios tan rápidos y profundos. Sin embargo, día a día vamos a las escuelas con la convicción de que lo que haremos dará frutos. Somos los más optimistas del mundo. Por eso hoy podría ser el día del optimista.
No tengo foto nueva para mostrarles porque no las bajé, pero como homenaje a mi MAESTRA  de patchwork, Mabel Coniglio, les muestro un trabajo de ella:

Hasta la próxima entrada, Laura.

lunes, 12 de agosto de 2013

Un individual y una reflexión

      Este es un individual que le regalé a una ex-compañera de trabajo, maestra como yo. Lo hice con mucho afecto, con el deseo de que la docencia vuelva a juntarnos algún día. 
    La tela del centro me la trajo mi hermana más chica (más joven, sería más correcto) cuando viajó a Nueva York hace unos tres años más o menos. No la había usado hasta ahora. Voy a hacer algunas cosas más para la cocina con ella, porque me gusta mucho como queda.  Las otras son telas de sábana que compramos en Once (un barrio de Buenos Aires donde se concentran muchos locales que venden telas), que resultaron muy buenas y económicas. Esto es algo que me gusta mucho del patchwork: no importa de dónde provenga cada parte, el todo las integra con armonía. Es algo que debemos aprender, ¿no creen?

 
Hasta la próxima entrada. Cariños, Laura

sábado, 10 de agosto de 2013

Una idea de mi hermana

      Esta bolsa es de Cecilia, una de mis hermanas. En verdad era una funda de almohadón que compró en el supermercado, con la idea de convertirla en un bolso o cartera, agregándole manijas. Me lo pidió y después de como seis meses, se lo di. Había quedado dentro de una bolsa, mezclada con varios retazos, y de repente, buscando otras cosas, apareció.
      Así quedó, como se dice ahora, "intervenida":




Hasta la próxima. Cariños, Laura.

viernes, 9 de agosto de 2013

¡Bolsa terminada!

Aquí está mi bolsa, terminada después de hacerla dos veces: la primera quedó un poco larga y a las manijas les sobraban muchos centímetros. La verdad no sé qué miré cuando las medí; quizás mi ilusión de ser un poco más alta (o menos baja) alteró las proporciones. La cuestión es que la descosí y la armé otra vez. Si miro de cerca le encuentro los errores, pero me propuse ser un poco más tolerante con las imperfecciones propias y ajenas, y este es un buen ejercicio.






Hasta la próxima! Laura

domingo, 21 de julio de 2013

Un bolso para mí

      Aprovechando las vacaciones de invierno, estoy cosiendo y tejiendo algo más que de costumbre. El plan es intentar completar algunos de los trabajos que esperan turno. Acá está el avance de mi bolso con los cubos que hice en verano: apliqué a mano pero el acolchado lo estoy haciendo a máquina. Estoy empezando a combinar las dos técnicas y aunque lo hecho a mano me seduce más, reconozco que coser con la máquina no es tan sencillo como muchos creen, y se convierte en todo un desafío.
     Les dejo unas fotos para que vean el avance:

 Por ahora, nada más. Hasta la próxima, Laura.

martes, 16 de julio de 2013

Pasó mucho tiempo... pero no parece!

    Y sí. Pasó mucho tiempo desde la última entrada. Tiempo del cronológico porque del percibido, parece que fue ayer que escribí sobre mi lugar.

    Es un tema apasionante el del tiempo: preocupó a los filósofos desde antiguo y en el cine da para varias películas. A mí particularmente me llama la atención las percepciones que tenemos del tiempo. Por lo menos las mías. Dicen los científicos que el tiempo pasa más rápido cuando crecemos porque cada año se percibe como una parte de lo vivido y si viviste más la proporción es menor. Sin embargo, yo tengo conciencia de tiempos especialmente largos en mi vida que cronológicamente son más cortos que otros. Por ejemplo, los cinco años de secundaria tienen en mi memoria mucha menos duración que los cinco de universidad, que a su vez están separados por ocho años que se me aparecen como eternos. Creo que esto tiene que ver con la intensidad con la que nos marca lo que vivimos. Extraños juegos los de la memoria...

    Es como el patchwork... (de esto trata este blog, de encontrar semejanzas entre la vida y el patchwork) donde hay proyectos que deberían poder hacerse en poco tiempo real pero que a mí me llevan una eternidad y otros que los pienso como a largo plazo y los resuelvo rápidamente. Aunque debo confesar que últimamente todos me están llevando muuuuucho tiempo. Igual no importa: yo disfruto mientras lo hago, tanto o más que cuando lo termino. Sobre esto ya escribí aquí.

    Les muestro el avance del anillo de bodas, que así se queda. Tengo que decidir qué hacer con él: un camino de mesa o aplicarlo a un almohadón o pie de cama.
   Me despido por hoy, hasta la próxima entrada.  Laura

miércoles, 22 de mayo de 2013

Me dejó pensando...

La fiesta virtual de Marcela me dejó pensando: no tengo en mi casa un lugar especial donde sentarme.
Voy de un lado a otro, acomodándome donde puedo o donde hago falta: puede ser uno de los sillones del living, o el esquinero de la cocina-comedor, el sillón de la terraza... y hasta la escalera, si hay luz de sol. ¿Tendré que preocuparme por esto y "buscar mi lugar en la casa"? ¿O será que toda mi casa es "mi lugar"? Yo creo que esto último. Les dejo un beso, Laura

sábado, 4 de mayo de 2013

¡Listo!

Finalmente... ya está listo el acolchado!

Después de mucho tiempo de esperar su momento, ya luce en la cama del dueño. Sólo faltaba el borde, y luego de varias vueltas, decidí hacerlo a mano, con un pespunte, doblando las dos telas hacia adentro, lo que resultó más simple de lo que parecía.
Como siempre, luego de hacerlo me pregunté por qué demoré tanto, pero yo sola me respondo:   disfruto con el proceso tanto como con verlo terminado en la habitación nueva de Pedro, mi hijo mayor.
Hasta la próxima entrada. Cariños, Laura


viernes, 12 de abril de 2013

Rompecabezas

Sigo descubriendo cosas que se parecen al patchwork.
Hoy miro los rompecabezas (puzzles les dicen algunos) y encuentro que requieren tanta paciencia, observación y constancia como un proyecto de patch.
Además veo a mi marido, Pablo y al menor de mis hijos, Santiago, armarlos y tengo la sensación que les pasa lo mismo que a mí con lo que voy cosiendo.
Les cuento por qué.
Por un lado, porque cada rompecabezas puede estar en proceso de armado ¡durante meses! Los arman sobre una tabla que apoyan en la mesa del comedor, lo tapan con otra y sobre ella ponen un mantel de cuero ecológico. ¡Ya nadie se acuerda de qué material es la mesa!

Por otro lado, creo que disfrutan más mientras lo arman que cuando lo terminan y a mí me pasa eso con la costura: cuando algo está listo lo miro y me siento orgullosa de lo que logré, pero lo que más me gusta es hacerlo. Debe ser por eso que descoso tanto, ¿no?
Les muestro mi "avance" en el anillo de bodas. Me cuesta mucho y coso y descoso, coso y descoso, coso y descoso...
Seguiremos intentando.
Ahora me despido, hasta la próxima entrada. Besos, Laura.

viernes, 15 de marzo de 2013

Desde el fin del mundo

Argentina es mi país, y ahora el país de donde viene el Papa. Quiera Dios que esto sea una oportunidad para que el mundo nos conozca y muchos viajen a disfrutar de nuestra tierra. Esto es algo de lo que pueden ver por acá:
  Embalse El Nihuil  en Mendoza
 Villa Gessel en Buenos Aires
 Cerro Aconcagua en Mendoza
 El Palmar de Colón en Entre Ríos
 Lago Puelo en Chubut
 Misiones
 Glaciar Upsala en Santa Cruz

Y como les prometí algo de costura, les muestro lo que está en proceso: un individual y los anillos de bodas. Uno con la máquina y el otro a mano, con mucha paciencia.


Por ahora, nada más. Disfruten del fin de semana, compartiendo en familia.
Cariños, Laura.

sábado, 9 de marzo de 2013

Día de la Mujer

       Recién me doy cuenta del tiempo que pasó desde mi última entrada. Lo que sucede es que a mediados de febrero los docentes volvemos a la escuela y eso nos acorta terriblemente el día. Otro día les cuento, para los que no son de aquí, cómo funciona el sistema educativo argentino.

        Pero el tema de hoy es una reflexión sobre el día de la mujer. Por lo general en esta fecha quedo "descolgada" o medio mal educada, porque no me sale felicitar a nadie. No me parece que sea para festejar un día que se instituye en recuerdo de mujeres que murieron por causa de condiciones laborales indignas, que aún hoy siguen existiendo. Hasta a veces me parece que esta fecha es de mal gusto.
        Por otro lado, aún despojándome de esta mirada si se quiere más histórica, tampoco me siento cómoda con esa imagen de mujer que se reconforta con ropa, zapatos y cosméticos, como si fuésemos muñecas,  o con flores y bombones. Yo quiero el chocolate todos los días del año y para flores, prefiero una maceta con una plantita que dure... Esto, por más día de la mujer que se quiera no hace otra cosa más que poner las diferencias donde no están. Somos diferentes, varones y mujeres, porque funcionamos, desde nuestra constitución biológica, de manera distinta, porque las mujeres estamos pensadas para la maternidad y los varones para la paternidad, no porque nos tengan que gustar una cosa u otra. 
            Y aunque los que me conocen ya lo saben, aclaro que soy un ejemplo de esto: me gusta ser una madre que cuida los detalles, (aunque mi marido e hijos me ignoren y se pongan la ropa arrugada) me encanta cocinar, cada día me apasionan más el patchwork y el crochet, pero disfruto (y a veces sufro) muchísimo de ir a la cancha a ver un partido de fútbol del campeón, Vélez. 
           Estoy convencida de que no hay cosas de varones y cosas de mujeres. En casa todos sabemos cocinar, poner el lavarropas, planchar ("alguna" mejor que "otros"), hacer las camas, encerar un piso (esto "algunos" mejor que "otra"), o comentar la actuación de tal o cual equipo de fútbol.
               Dejo esto para la reflexión y me gustaría recibir algún comentario.
               Cariños y hasta la próxima entrada (prometido: algo de lo que estoy cosiendo). Laura


lunes, 11 de febrero de 2013

Una bolsa para Cristina y algo más

Hace dos o tres años Cristina, una catalana muy simpática que vive aquí, en Buenos Aires, nos regaló a mi amiga Fabiana y a mí unos cuadraditos de tela de distintos colores y estampados que su madre le había enviado desde Barcelona.  Quedaron guardados esperando su destino: trapitos esperando las puntadas...
Finalmente, una tarde de enero, las puntadas los encontraron y los rescataron y en sólo una tarde, sí sólo una!!!!, los convirtieron en esta bolsa, que por supuesto se fue ese mismo día para la casa de Cristina. Aclaro que los cosí a máquina.


Me entusiasmé y seguí uniendo cuadraditos y armé una bolsa para guardar las bolsitas del súper. Allí van las verdes, que usamos para la separación de residuos. Se las muestro:

Espero que les haya gustado. Saludos y hasta la próxima.


domingo, 10 de febrero de 2013

Algunos trabajos de años anteriores...

Mi amiga Susana me envió hace tiempo unas fotos de un almohadón que le regalé cuando se mudó. Se ve que le gustó porque le sacó ¡¡¡¡once fotos!!!!
Se los muestro: está hecho a mano y es un "verdadero patchwork" porque la mayor parte de las telas que usé eran retazos de telas que me regalaron, algunas tan pequeñas que sólo alcanzaron para uno o dos yo-yos. Ahora que lo miro, tal vez le falta un poco de acolchado...




Igualmente, a mí me gusta bastante y a Susana más, y eso es lo importante cuando alguien hace un regalo especialmente pensado para otro. ¿No les parece?
Cariños y hasta la próxima.

lunes, 4 de febrero de 2013

Trapitos y ... ¿pensamientos?

Dice Santiago, el menor de mis hijos: "Tu blog es aburrido. Es para mostrar lo que hacés y vos mostrás lo que pensás. Tiene que llamarse trapitos y pensamientos."
Yo le respondo: "Las puntadas son como los pensamientos. Ellas organizan las telas y los pensamientos organizan nuestra mente."
Me responde: "Ah, bueno, si vos lo decís..."
Yo creo que me toma el pelo, pero como tiene trece años, lo dejo.
Un beso y hasta la próxima entrada, con costura. Prometido.

viernes, 1 de febrero de 2013

Vacaciones... y proyectos encaminados

Hace un año les contaba que había estado unos días en El Durazno Alto, San Luis, en un lugar hermoso, en medio de las sierras. Este año volvimos por más días y yo me llevé mis telas, el costurero y ¡una plancha!
Logré armar dos diseños que tenía abandonados y avanzar  (muy poco) con el anillo de bodas que me está dando bastante trabajo.
Estoy muy contenta con estas vacaciones porque pudimos descansar, compartir en familia y conocer otros lugares.
Además yo pude coser y hacer unas flores en crochet. ¿Qué más puedo pedir???

Les muestro lo que hice, aunque no esté terminado, y el lugar maravilloso en el que estuvimos.

 Ahora falta decidir sobre qué aplicarlos, sacarles los papelitos y coserlos a mano. Supongo que será un bolso para mí de color azul francia, como la tela donde le saqué la foto. Veremos...


  La mitad de la estrella, luego de descoserla porque el centro no calzaba. Si no hubiera tenido que corregir tanto, ya tendría dos...
Acá estamos mi estrella y yo. No dejen de mirar el paisaje de alrededor porque eso sí es una obra de arte (claro que de un artista incomparable) que Patricia y Alfredo, los dueños del lugar, se ocupan de conservar.
Si quieren saber más sobre esta maravilla, visiten http://altosdeldurazno.tripod.com/.



Y un poquito de lo que tejí...

Por ahora me despido, hasta la próxima, donde les mostraré más del viaje y algún avance de trabajos. Cariños, Laura.


miércoles, 9 de enero de 2013

Para ir ganando tiempo...

Para que no me agarre el apuro a fin de año...
terminé una de las botas de navidad que empecé...
¡¡¡¡en el 2011!!!!!

¡Es verdad! La comencé en diciembre de 2011 y allí quedó, olvidada y sin el borde superior en un rincón del mueble donde se amontonaban las cosas de patch.
Empecé este año con una extraña necesidad de ordenar (¿durará?) y la encontré. Decidí entonces que había que terminarla y así quedó.


Veremos qué otra cosa decido terminar mañana...
Cariños, y hasta la próxima.

miércoles, 2 de enero de 2013

PRIMER TRABAJO DEL AÑO

UNA AGARRADERA PARA MI COCINA

 En mi cocina sólo había una agarradera pidiendo el retiro y entre las cosas de patch sin terminar estaba un pequeñito log cabin hecho a mano sobre tela, con la técnica de foundation. También había una tira de tela verde y varia tiras que quedaron cortadas de la tela azul con estrellas del acolchado que con mi amiga Fabiana le cosimos a mi sobrino. De esto les debo la historia.
Con todo eso armé el cuadrado agregando vueltas usando sólo la máquina, como vi que varias hacen. Quedó bastante aceptable y lo hice muy rápido, comparando con lo que coso por lo general a mano. Para la parte de atrás usé un cuadradito de tela la funda vieja de la tabla de planchar, que es resistente al calor.

Lo completé usando los accesorios de la máquina, acolchando y colocando una cinta al bies que tenía. Sinceramente, quedé bastante conforme con el resultado.
Cariños a todos y hasta la próxima.